“Preciosa casa colonial”
25 Jul 2017
Nos alojamos en esta preciosa casa colonial por recomendación de nuestros primeros anfitriones a nuestra llegada a La Habana. La elección no pudo ser mejor. Está situada en el barrio residencial de Vedado, por lo que es una zona muy tranquila.
Es una casa particular enorme, de dos plantas de estilo colonial, nos alojamos en la segunda planta, en una habitación con baño y bañera, que daba la sensación de estar en otra época, absolutamente fascinante.
La habitación, ricamente adornada con muebles de caoba, preciosa, como toda la casa, estaba, realmente, muy cuidada, a pesar de ser muy antigua.
El desayuno muy rico, servido por “Tachita”, hermana de la dueña, una persona encantadora, muy amable y servicial, que se tomaba un ratito para charlar con nosotros, los días que estuvimos allí.
Teresita, la dueña, un encanto de mujer, tuvo la deferencia de dejarnos quedar en la habitación hasta primera hora de la tarde, ya que nuestro vuelo de vuelta a España no salía, hasta las 9 de la noche.
Totalmente recomendable casa particular en Habana.
Muchas gracias por todo.